Angahuan, agosto 2017.
Rebozos de fibras naturales bordados en telares prehispánicos.
Cerca de las faldas del Paricutín se asoma el pueblo de Angahuan, cuya tradición en rebozos tejidos le ha dado fama mundial.
Las artesanas de esta comunidad elaboran los textiles en telar de cintura, un instrumento prehispánico que ha sobrevivido a los siglos.
Para comenzar a bordar sujetan los hilos a unas barras de madera que van de un extremo a otro con el objetivo de crear un efecto de caída. Una vez que las fibras se encuentran paralelas, éstas se entrelazan hasta formar tejidos firmes o estéticas figuras.
Conoce aquí su trabajo.
Textos y fotografías: Yadira Morán – Edición y corrección de estilo: Larissa Gil