El turismo gastronómico en México: ¿qué hay detrás?

Durante más de 15 años hemos trabajado con algunos de los restaurantes insignia de la gastronomía tradicional mexicana.
Hemos explorado mercados en pueblos y ciudades. Hemos descubierto universos sensoriales de la mano de las extraordinarias cocineras tradicionales. Conocemos el valor que la gastronomía tradicional mexicana posee y ofrece al viajero, pero nunca nos habíamos aproximado formalmente a ella desde la perspectiva de cómo se produce y qué impacto supone sobre quienes la hacen posible. Hasta ahora.

Desarrollamos un fascinante proyecto cuyo objetivo era diagnosticar la cadena de valor del turismo gastronómico. ¿Cómo se relacionan los restaurantes con quienes producen los ingredientes y productos tradicionales? ¿Cuál es el impacto sobre las economías locales? ¿Está el turismo gastronómico contribuyendo al mantenimiento de las tradiciones culinarias de México, un país cuya cocina tradicional es Patrimonio de la Humanidad?

El Banco Iberoamericano de Desarrollo (BID) impulsó este proyecto, enmarcado dentro de la Política de Fomento a la Gastronomía Nacional coordinada por la SECTUR, que pretende hacer de la gastronomía tradicional un eje de desarrollo local y consolidar su potencial como atractivo turístico.

Para la realización de este diagnóstico se realizaron más de 100 entrevistas a prestadores de servicios, productores, comerciantes y cocineras tradicionales en dos destinos de gran tradición gastronómica: Uruapan en Michoacán y San Cristóbal de las Casas en Chiapas.

El análisis respondió a las preguntas formuladas, y planteó una serie de líneas de trabajo para articular la política de fomento a la gastronomía en los próximos años. Las acciones se dirigen a mejorar la capacidad competitiva de productores, intermediarios y prestadores de servicio y, además, fortalecer las conexiones entre ellos.